Me baña mi madre en la oscuridad,
me viste a cielo abierto y me peina al sol.
Mas, si voy a salir en noches claras de luna,
me ciñe más el cíngulo y le hace doble nudo.
Y me ha dicho: “Juega con las vírgenes;
danza con los niños;
mas no te asomes nunca a la ventana,
ni escuches requiebros de mancebos;
y duda, duda mucho de consejos de viudas”.
“Una tarde, pequeña, como a todas,
alguno vendrá a llevarte en medio de fastuoso cortejo,
de timbales sonoros y de amorosas flautas".
Pierre Louys